sábado, 1 de noviembre de 2008

Revisando AFJP

El Poder Ejecutivo envió al Congreso Nacional un proyecto por el que se propicia la eliminación del actual régimen de capitalización que deberá ser sustituído por el único régimen de reparto. El sistema actual es mixto, dado que aquellos que aportan de sus ingresos a las AFJP reciben un beneficio compuesto por laprestación compensatoria por los años que aportaron hasta 1994, que paga el Estado, y otra que se relaciona con la capitalización individual de los aportes posteriores a ese año, mientras que en forma paralela subsisten los que aportaron al sistema de reparto. La privatización" impuesta" en la década menemista y el plan de convertibilidad, fue auspiciada por Instituciones Financieras Internacionales (Banco Mundial - FMI) y por el gobierno de turno bajo una concepción ortodoxa de liberalismo económico ya que se planteaba que un nuevo mercado de capitales aportaría mayores fondos para inversiones productivas, en consecuencia habría un mayor crecimiento económico incrementando así el nivel de ahorro individual. De esta manera la previsión deja de tener su registro social y solidario pasando a un orden individual y especulativo. Pero habiendo transcurrido 14 años de su implementación son claras las evidencias del fracaso, asimismo , los intereses de los grandes bancos que están detrás de las AFJP se oponen a su modificación. Si revisamos un poco el pasado podemos recordar que la reforma administrativa del Sistema de Seguridad Social comenzó en 1991 junto con el plan de convertibilidad.
Durante ese mismo año el Poder Ejecutivo dictó el decreto Nº 2284/91 de desregulación económica , donde se disuelve, entre otro entes públicos, el Instituto Nacional de Previsión Social y las Cajas de Asignaciones Familiares, creando el Sistema Unico de Seguridad Social mediante otro DNU (Decreto de Necesidad y Urgencia) Nº 2741/91 . Con esta modificación se disolvieron los directorios de las Cajas y la Administración Estatal de las Cajas de Seguridad de los recursos de la Seguridad Social, para el pago de las prestaciones. Como si las medidas tomadas fueran pocas mediante la ley Nº 23.982 de consolidación de pasivos previsionales se indujo a los beneficiarios a aceptar el pago de parte de sus haberes devengados mediante títulos públicos (BOCONes), pero este mecanismo solo benefició a los bancos ya que se quedaron con esos títulos a valores irrisorios ante la imposibilidad de que los jubilados esperaran hasta 16 años para hacer efectivo ese cobro. En el año 2001 se elevaron las edades para jubilarse (60 años las mujeres y 65 los varones) y los años de servicios con aportes (30 años en 2007). A través de la ley 24.241 el Estado se desentendió coo garante de la Seguridad Social consagrado constitucionalmente y consolidó una matriz regresiva de distribución del ingreso, congelando el salario de los jubilados durante mas de 10 años y dejando si jubilacion a mas de un tercio de los adultos mayores, con el objeto de mejorar el rendimiento del mercado financiero local. Los fondos administrados por las AFJP constituídos por el 71% de los afiliados del SIJP (deducidas las altísimas comisiones que cobran las administradoras por gastos de administración, publicidad y promoción) asciende a unos 9.000 millones de dólares que en estos 14 años no se han utilizado para incrementar la inversión ni la actividad económica sino para comprar títulos públicos y hasta para hacer adquisiciones de títulos y acciones en el exterior.
Pero el sistema se tornaba mas injusto con la afiliación "compulsiva" de los indecisos que son quienes no optaron explícitamente por el régimen de reparto y quedaban cautivos en alguna AFJP, hecho que se corrigió e el 2007 con la posibilidad de optar. El nuevo proyecto planteado por el gobierno gira el anterior (Sistema Integrado de Previsión Argentino)- que es una reforma integral y estructural - al proponer la disolución del Régimen Privado de Fondos de Pensión, capturando el aporte que realizan los trabajadores activos, en las AFJP y así financiar un nuevo sistema público, solidario, redistributivo y administrado por la ANSES, que será supervisado a su vez por una comisión mixta delCongreso de la Nación.
La solución hacia los aportantes al sistema de capitalización es que la plata que pusieron e las AFJP y quedó "licuada" por la caída de los títulos y acciones que las mismas administran, será compensada con el reconocimiento de que todos estos años hubieran aportado el 11% al sistema estatal por lo tanto su haber jubilatorio será el que pueda pagar el sistema de reparto en el momento en que se jubile. En síntesis, mas allá de la excusas poco sólidas que exponen quienes no coinciden ideológicamente con este nuevo argumentando cierta desconfianza con respecto a la administración estatal, queda claro que el sistema privado nunca funcionó como tal y no dejó huellas de ser mas confiable que el de reparto, menos aún, cuando ni siquiera aseguraba un haber mínimo en caso de disolución de la administradora correspondiente.
Es legal, constitucional; es el Estado y se hace cargo. ¿No es eso acaso lo que pedimos los ciudadanos que trabajamos día a día para mantener la democracia?

Fuente: H. Rovelli - Políticas Públicas Estratégicas - FLACSO (Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales)